top of page

🌿 Para llegar a un lado, hay que irse de otro

A veces avanzar no es cuestión de saber a dónde vas, sino de atreverte a dejar donde ya no puedes quedarte.


ree

Hay momentos en la vida en los que sentimos

que necesitamos un cambio.

Un movimiento.

Un paso hacia algo nuevo.


Pero no avanzamos… no porque no sepamos hacia dónde queremos ir,

sino porque nos da miedo soltar lo que ya conocemos.


A veces cuesta más despedirse que empezar.

Nos aferramos a lo que nos resulta familiar,

aunque nos duela, aunque nos limite, aunque ya no nos haga crecer.

Pero quedarse donde no encajamos también es una forma de dolor.

Un dolor lento, cotidiano, casi invisible…

que nos recuerda cada día que merecemos algo distinto.

Irse no siempre es huir.

Muchas veces es un acto de honestidad:

un “hasta aquí” dicho en voz baja, pero desde el alma.


Para llegar a un lado, hay que irse de otro.

Y ese “otro” a veces es un lugar,

otras es una relación,

y muchas veces… es la versión que ya no queremos seguir siendo.


Duele dar el primer paso,

pero duele más quedarse sentado en un lugar que ya no sostiene nuestra verdad.


Hoy te invito a mirar con sinceridad tu camino:

¿Dónde ya no eres tú?

¿Dónde te quedas por costumbre, por miedo o por inercia?

Muévete hacia lo que te hace respirar más hondo.

Hacia lo que te abre.

Hacia lo que te permite ser más tú.


El destino no está tan lejos.

Lo que cuesta es decidir salir. 🌿✨


Modo Pausa

Un espacio para volver a ti.

Comentarios


bottom of page