Tengo una vida que vivir: soltar el piloto automático y elegir de nuevo
- Sebastián Sánchez

- 17 sept
- 1 Min. de lectura
Reflexión para reconectar con el presente, soltar lo que no importa y elegir cómo quieres vivir, sin esperar el momento perfecto.

A veces lo olvidamos.
Entre pendientes, correos, mensajes que esperan respuesta…
vivimos como si estuviéramos en una sala de espera,
aguardando a que empiece “la vida de verdad”.
Pero esta, la de ahora,
es la única que tenemos.
Y pasa rápido.
No como un tren que puedes volver a tomar,
sino como el humo que se disuelve en el aire.
“Tengo una vida que vivir” no es un eslogan para motivarse,
es un recordatorio íntimo.
No viniste solo a cumplir obligaciones.
Viniste a sentir el sol en la cara,
a reír hasta olvidar el reloj,
a probar sabores nuevos,
a equivocarte y aprender.
Quizás hoy no puedas cambiarlo todo.
Pero sí puedes, al menos por un instante, dejar lo que tienes entre manos… y elegir de nuevo.
Porque a veces no se trata de rehacer tu vida entera,
sino de darte un momento para volver a decidir cómo quieres vivirla.
¿Hace cuánto no te detienes, aunque sea un minuto,
a recordarte que esta es tu vida?




Comentarios